
Sos más grande que yo. Un año. Pero muchas veces creí que debía ser yo quien tenía que cuidarte. Muchas veces, asumí tus culpas, dejándote libre con la espalda cargada de estupideces dichas.
Dí mi vida por esto, por vos, por el 'amor', por aquello que fuimos capaces de construir...pero como es tu costumbre, nunca te hiciste cargo. Me intoxicaste con todo eso que decías, y te creí.
Hoy ahora, yo no te creo. No quiero creerte. Aunque quisiera no puedo creerte. Recuperé mi alma y mi corazón, de lo más profundo del océano. Le devolví el coraje y la fuerza para continuar viviendo. ¿Crees que sos capaz de volver cuando querés? No sabes, ni siquiera supones lo que yo pasé. No tenes la menor idea de todo lo que lloré. De todo lo que imploré para que vuelvas. Pero no así. No así. Esto no es positivo. Para mí, las cosas cambiaron. Definitivamente, para vos no. No tengo problema con eso, podés seguir viviendo como siempre quisiste. Podes seguir mintiéndote. Pero no conmigo. No otra vez. Sé que puedo brillar por mi cuenta, sé que puedo vivir sin vos si realmente me lo propongo. Me enseñaste a amar, pero no fuiste vos quien me enseñó a vivir...voy a vivir sola, porque puedo vivir sin vos. No voy a regalarte el poder de destruirme otra vez.
Podes irte, sabes dónde esta la salida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario